Cocinar con albahaca no tiene que ser caro. Prueba estas recetas económicas, sabrosas y abundantes.
Los pollos de primavera son tiernos y suaves, con carne dulce y la cantidad justa de grasa y magro. También son más pequeños, por lo que tardan menos en asarse y son relativamente fáciles de controlar sobre el fuego. El pollo de primavera se sirve con cebollas, ajo y chalotes para hacerlo más sabroso, y las patatas han absorbido los sabores de los ingredientes anteriores, ¡que es la esencia del plato!
El cerdo al estilo tailandés es un plato casero clásico, apreciado por su sabor rico y picante. Las especias tailandesas únicas se combinan con la tierna carne de cerdo para crear un aroma picante que te hará querer comer tus dedos. Este plato es rico y sabroso, excelente con arroz blanco, cada bocado está lleno de capas, después de comerlo, la fragancia persiste en la mejilla, ¡es definitivamente una opción deliciosa que nunca se detendrá!
Este clásico plato italiano de espaguetis a la boloñesa incluye una pasta elástica acompañada de una salsa boloñesa rica y aromática. La salsa de carne se saltea con ajo y cebolla picados, luego se agrega la carne y se cocina hasta que esté bien condimentada. Luego se combina con tomates cherry, pasta de tomate y salsa para resaltar el rico sabor del tomate. Luego se añade albahaca fresca, vino tinto y aceite de oliva para realzar el sabor y finalmente se añade un poco de mantequilla para que la salsa sea más suave. Todo el plato es rico y complejo, lleno de sabores italianos clásicos y brinda una satisfacción reconfortante.
La pechuga de res con rábano y sopa clara es una sopa de rico sabor que incluye tierna pechuga de res y dulce rábano blanco. Después de un largo período de cocción, la pechuga de res queda tierna y llena de sabor a carne, mientras que el rábano blanco absorbe la esencia de la sopa y resalta su dulzura natural. La base de la sopa es clara y deliciosa, con un toque picante, y tiene un sabor cálido y reconfortante. Este plato a menudo se disfruta como plato principal o sopa, y se puede combinar con udon, arroz o arroz blanco para lograr una experiencia de sabor satisfactoria.
El pimiento asado con vinagre balsámico es un plato vibrante con pimientos asados marinados en balsámico, miel y hierbas. La combinación de sabores ahumados, dulces y ácidos lo convierte en un delicioso acompañamiento o aperitivo.