Cocinar con 20 g de cacahuetes no tiene que ser caro. Prueba estas recetas económicas, sabrosas y abundantes.
El ñame (huaishan) es rico en proteínas mucosas y amilasa, que pueden proteger la mucosa gástrica y promover la secreción de jugo digestivo; El mijo es de naturaleza suave y sabor dulce, contiene fibra dietética y vitaminas B, que pueden aliviar problemas como el exceso de ácido estomacal y la hinchazón abdominal. La combinación de maní y leche es muy fragante y delicada. Mereces ser amado.
Después de probar un bocado de gelatina de leche de coco con un intenso aroma a coco en Sabah, ¡me convertí en un mago de la cocina y logré recrear con éxito esta exquisitez! Comparto dos recetas deliciosas: una versión ligera y la versión rica original (con un suave aroma a leche). La versión rica lleva crema batida y leche de coco, y el aroma a leche es tan intenso que te hará sentir como si estuvieras comiendo nubes. Es una delicia al tomar una cucharada. Sin embargo, la versión rica tiene un contenido calórico ligeramente superior. Es ideal para saciar tus antojos ocasionalmente. Si quieres comerla a menudo, la versión ligera es la opción ideal sin sentirte pesado. Sigue mis pasos: abre el coco con cuidado y la gelatina quedará suave, ¡y podrás disfrutar fácilmente de la misma dulzura!
La carne es tierna y sabrosa, acompañada de pepinos crujientes, adornada con cacahuetes crujientes, pimientos rojos y cilantro verde, y cubierta con salsa agridulce. Al morderla, su sabor ácido, picante y fresco estalla en la punta de la lengua, refrescando y aliviando la sensación grasosa. Un plato perfecto para las comidas de verano.