Rompe tu rutina con estas recetas de una pequeña cantidad de semillas de sésamo blanco inesperadas pero deliciosas: divertidas, fáciles y llenas de sabor.
Corte las patas de cerdo en trozos y blanquéelas para eliminar la espuma. Remoje las habas de soja con antelación. Caliente el aceite y saltee las rodajas de jengibre. Añada las patas de cerdo y saltee hasta que estén ligeramente amarillas. Añada salsa de soja clara y salsa de soja oscura para sazonar. Añada agua caliente para cubrir los ingredientes. Lleve a ebullición a fuego alto y luego cocine a fuego lento. Cuando las patas de cerdo estén blandas y podridas, añada las habas de soja y continúe cocinando hasta que su aroma se desborde y la sopa espese. Espolvoree con cebollino picado antes de servir. Las suaves y pegajosas patas de cerdo quedan envueltas en la salsa, y las habas de soja absorben la salsa. ¡Una experiencia deliciosa en un solo bocado!
El refrigerador estaba lleno de lichis, que vecinos, amigos y colegas me daban uno tras otro, ¡y al instante recordé la sopa de pollo con lichis que preparé! Siempre pensé que el precio de los lichis era "arrogante", y cada vez que preparaba esta sopa, era como un "lujo", y seguía sin quedarme satisfecha. Este año, el precio de los lichis es asequible, y con el entusiasmo de todos, ¡por fin puedo volver a disfrutar de este plato favorito! ~~ Quita los huesos y la pulpa de los lichis, ponlos en la olla con pollo fresco y tierno y dátiles rojos sin hueso, y añade Ophiopogon japonicus y Polygonatum odoratum para neutralizar el calor. ¡Incluso yo, que me da miedo enfadarme, puedo beberla con tranquilidad! Los aromas afrutados y carnosos se filtran lentamente, y la sopa es dulce y suave, ¡y aún me recuerda al hada de mis recuerdos! Después de beber la sopa y comer la carne, debo decir que esta oleada de comida es simplemente una "ayuda divina". Esta vez por fin puedo beber lo suficiente y compensar todas las "bebidas" que no tomé antes.
Corte el lomo de cerdo en rodajas y marínelo con salsa de soja y almidón durante 10 minutos. Caliente el aceite para freír la pasta de frijoles, el ajo picado y los chiles secos. Añada el caldo y llévelo a ebullición. Añada las rodajas de carne y escalde las verduras. Vierta el caldo en un bol, añada el ajo picado y el chile en polvo, y vierta aceite caliente para realzar el aroma. Las rodajas de carne quedan tiernas y sabrosas, la sopa es picante y suave, y las guarniciones absorben el aceite rojo. ¡Es caliente y refrescante al morderlo, y queda perfecto con arroz!
El melón de invierno estofado con panceta de cerdo y tofu es un delicioso plato casero. El filete de jamón dorado frito (probablemente panceta de cerdo) se cuece con melón de invierno, tofu, champiñones y otros ingredientes, y se condimenta con ajo, chalotes, cebolletas, rodajas de jengibre, etc. Finalmente, se condimenta con salsa de ostras, salsa de soja oscura y azúcar, se cuece hasta que se absorban los sabores y se espesa con agua de maicena. Tiene un rico sabor y un delicioso aroma.
3. Huevos de codorniz cocidos en frío: Hervir los huevos de codorniz, pelarlos, acompañarlos con tiras de pepino y zanahoria, y rociarlos con salsa blanqueada. Es refrescante y apetitoso, y es un gran manjar para aliviar la grasa en la mesa de verano.
El "Taza Fresca de Verano" contiene tomates cherry, pepinos y gelatina helada. Sus beneficios se reflejan principalmente en los siguientes aspectos: - Repone agua y electrolitos: La gelatina helada tiene un alto contenido de agua y, al combinarla con pepinos (con un 95 % de agua) y tomates cherry (con un 90 % de agua), repone rápidamente el líquido en verano. Los pepinos también contienen potasio, que ayuda a mantener el equilibrio electrolítico. - Aporta vitaminas y fibra dietética: Los tomates cherry son ricos en vitamina C y licopeno, los pepinos contienen vitaminas del complejo B y fibra dietética, y la gelatina helada (compuesta principalmente por resina vegetal) también aporta una pequeña cantidad de fibra dietética. La combinación de estos tres nutrientes promueve la peristalsis intestinal y facilita la digestión, lo cual es ideal para la mayoría de las personas.
Sopa de melón de invierno, vieira, semillas de Coix y hueso de abanico de cerdo. La sopa es de color blanco lechoso y transparente. El brillante melón de invierno, la vieira dorada y las semillas de Coix, de color blanco lechoso, se destacan en la sopa de hueso, espolvoreadas con un toque de cebolleta picada, lo que le da un aspecto suave y elegante. El hueso de abanico de cerdo proporciona una sopa de hueso suave y rica en calcio. El melón de invierno, que promueve la diuresis y la hinchazón, las semillas de Coix, que eliminan la humedad, y las vieiras, que aportan frescura, complementan sus nutrientes, nutriendo y refrescando. Un bocado de sopa caliente nutre el cuerpo y la mente. ~ Las semillas de Coix son ligeramente frías por naturaleza, por lo que cocinarlas directamente puede resultar incómodo para personas con problemas de bazo y estómago. Después de freírlas, reducen el frío y resultan más suaves. Las semillas de coix fritas tienen un efecto más destacado para fortalecer el bazo y eliminar la humedad, lo cual es adecuado para personas con mucha humedad y bazo y estómago débiles, como quienes son propensos a la distensión abdominal y a la lengua gruesa y grasosa. ~ Si es propenso a la irritación, la sequedad bucal y la amargura, o presenta síntomas de calor húmedo como estreñimiento y acné, el efecto de las semillas de coix crudas para eliminar el calor y la humedad es más potente, y es más adecuado para cocinarlas directamente.
Esta sopa es rica y sabrosa, más fácil de lo que crees. Está aderezada principalmente con algunas de las especias y condimentos chinos más comunes. También puedes usar esta receta para otras carnes y descubrir más platos (ver mi próxima receta).